La verdad es que he tenido varias cosillas interesantes este fin de semana, más que interesantes, son graciosas, para que al menos, las pocas personitas que me leéis hagáis unas risas conmigo.
El viernes hubo un concierto, me acompañaron Juyu, el zombi, y Tierruna, y justo cuando acababan, me dijeron que no podía tener allí a Tierra, al aire libre, no lo acabo de entender, pero me fui sin rechistar. Era un grupito de jazz bastante majo. No conozco el nombre del grupo, una pena, pero eran bastante amenos.
Sábado, llegamos al maravilloso y esperado sábado, púes memorable, memorable, una llamada absurda, y poco más, soy un ser en estado de hibernación veraniega.
El domingo sí que hubo una proposición de un futuro juntos, sería tan bonito, que alguien piense en compartir algo contigo a pesar de tantas cosas. Y esa gente a la que crees que tratas bien y no te lo agradece, ni te da un gesto que te haga sentir igualmente apreciado… son las espinas de las flores, pero no era yo la flor.
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