De vuelta a Calpe

Martes por fin, estoy en la oficina, con un montón de cosas por hacer, entre ellas, la más tediosa, pasar enormes facturas, pero cuanto antes te poner (antes te aburres) antes acabas. Hoy he llegado casi media hora tarde, por no decir 29 minutos, ¡que horrible!, como soy tan impuntual, lo odio… Intentare remediarlo, pero es que si lo digo muy alto…

He estado en Madrid con mi hermanito, hasta este domingo, desde el miércoles, todo el centro iluminado, hmmm, bonito, la verdad, eche en falta la cámara de fotos, pero bueno, ha sido de tranquilos, sin mayores preocupaciones que comer y esas funciones vitales. Encontré a Oli muy sano, estábamos a gusto, me encanta verle, pero me da pena que este tan lejos. Aunque sus amigos le cuidan bien, a su manera.

La penúltima noche que dormí en Madrid, en casa de Nico, el amigo de Oli, tuve un sueño extrañisimo, soñé que un señor calvo me agarraba las manos, y me empezaba a tocar, y no podía moverme, ni gritar, hasta que me desperté. Cuando se lo conté a Cat, me quede en su casa la última noche, le dio mucho miedo, y me dijo, que podría ser un fantasma. ¡Que mal!...

Estuve en casa de Cat, pero no pude conocer a su sobrino, ni a vi a su madre. Estaba trabajando. La verdad es que se porto, porque si no es por ella, no me despierto, tenía que coger el tren a las 9.20, y me desperté a las 7.10, medio muerta, me duche y fuimos a la estación.

En el tren la señora que estaba a mi lado, leía un libro de ejercicios para moldear el cuerpo, y me ofrecio un poco de su bocadillo, que encantadora, eso demuestra clase, no sólo los bolsos de piel de Salvador Bachiller.

Comí mucha comida basura, pero mucha, y donuts de chocolate.

Al final no hemos podido hacernos juntos el tatto, así que me lo harán aquí, y él se lo hará allí. Porque su amigo, estaba de vacaciones, algo muy normal, la verdad.

Eusti cuido de los niños, Tierra, Kramer, Ichi, Gorka y Babosín.

He ido al cine con mi maridito, fui el domingo, a ver, “El perfume”, me encanto.

He verificado que todos los tíos dedican su tiempo a jugar a la [insertar aquí distintos aparatos ej: play, PC] en todas las comunidades autónomas.

He enviado unas poquitas tarjetitas navideñas.