“Me prometiste la luna, pero la luna no es tuya”
Tenía esa frase escrita en la agenda, no recuerdo porque exactamente. Anoche la luna estaba naranja, me encanta cuando está así. Una pena que no me diese tiempo a hacerle fotos.
Mañana tengo que hacer un montón de cosas, de esas con cita, así que espero que lo hagan todo a tiempo, para que una cita no me haga perder otra.
Aún no sé el resultado de los análisis de Tierruna.
He tenido un cliente, que… cómo se puede decir sin faltar a nadie. Bueno, el caso es que es un señor de una edad aproximada a la de mi padre, teniendo en cuenta que mi padre tiene casi la misma edad que mi abuelo. Y por todo lo que ha dicho, era evidente que se me estaba insinuando, pero sin insinuarse. Si hubiésemos estado en la era cavernaria, me pega con la porra en la cabeza. Y por lo que he podido observar no puedo confiar en la “protección” de mis compañeros de curro.
Oh, y el domingo pasado, tuvimos sesión de pelis de los 80. Y gusanitos. Cuidándonos.
Y eso de ponerse a recordar, encontré una cartita de esas que te escriben con 12 años. Que risa… que será de esas chiquillas. Que bueno.
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